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Tecnología

¿Qué ventajas aporta la célula N-Type?

21/10/2021 / Por Jean Francois Picard
Las células de tipo N, debido a su composición y propia naturaleza tienen una mayor tolerancia a las impurezas y menos defectos, por eso ofrecen mayor rendimiento y eficiencia general. Veamos esas ventajas de una en una, y como veréis, ¡no son pocas!
Ntype

Mejor eficiencia

Las celulas N-Type son simplemente más eficientes, es decir, con la misma superficie se consigue más potencia, con lo cual más energía en el tiempo. Esa es una de las principales ventajas ya que el mercado exige siempre mayores potencias. En los últimos años ese incremento de potencia se consiguió principalmente aumentando la superficie de captación, es decir usando células de mayor superficie y/o usando simplemente más células por panel. Pero ese incremento de superficie repercute en módulos cada vez más grandes, más pesados, y entonces cada vez menos manipulables. Varias voces del sector opinan que ya hemos llegado a tamaños de módulos máximos, y que no se debería ir a más grande. Por lo cual, la única manera de conseguir más potencia es logrando más eficiencia. Y la célula tipo n es una de las mejores aliadas en este desafío de conseguir más potencia sin incrementar la superficie del módulo. Ahora quizás es cuando vamos a ver realmente nuevos incrementos en la eficiencia de los módulos.

 

No LID

En las células N-Type, como hemos comentado, se suele usar fosforo para el dopaje de las células. Al no usarse boro, no hay combinación posible entre el boro y el oxígeno que puede estar presente en la célula. Esta combinación boro-oxigeno es la gran responsable de provocar la perdida de potencia por degradación de efecto LID (Light Induce Degradation por sus siglas en ingles). Este efecto LID presente en los módulos de tipo p que usan boro como dopaje provoca pérdidas de rendimiento entre el 1% y 3% de normal, y a veces bastante más, desde los inicios de la vida de la instalación, es decir en las primeras exposiciones al sol. Esas pérdidas son irreversibles, es decir, para toda la vida del módulo FV. Lo que no es poco cuando se toma en cuenta toda la energía que representa eso a lo largo de la vida útil de una instalación FV, que debería llegar a más de 35 años de funcionamiento. (Algunos fabricantes usan galio en vez de Boro en sus células P-Type, evitando así el efecto boro-oxigeno, teniendo más potencia disponible, y generando más energía a lo largo de la vida útil, por ejemplo, Longi desde hace años, JA Solar y REC en sus respectivas nuevas gamas de módulos.)

 

Menos PID

Hablando de degradación, esta vez inducida por potencial, el N-Type tiene también una mayor resistencia al PID (Potencial Induce Degradation por sus siglas en inglés).

El PID con células tipo p viene principalmente con efecto de imperfecciones del vidrio, como por ejemplo el oxígeno, que combina con el boro. Mientras que, en los módulos tipo n, es la calidad de la célula en sí la que puede provocar unas pérdidas por PID, y al no tener Boro, se elimina gran parte del problema.

Estas dos ventajas, no LID y menos PID, se resumen para el cliente final en menor degradación en el primer año, y también en menor degradación en los años siguientes. Es decir, más energía a lo largo de la vida útil de la instalación.

¡Pero eso no acaba aquí!

 

Mejor coeficiente de temperatura

Las células de tipo n tiene un mejor coeficiente de temperatura que las tipo p. Es decir que la perdida de potencia, principalmente por bajada de tensión, se ve afectada de menor manera cuando sube las temperaturas. Lo que permite mayor potencia de salida en condiciones difíciles para el silicio, es decir cuando más calor hace, que en general, es cuando más irradiancia hay también. Con lo cual podemos decir que las células de tipo n ofrecen más potencia cuando las condiciones son más adversas e interesantes.

 

Coeficiente de Bifacialidad mucho más elevado

Como nada ocurre por casualidad, aquí también se habla de módulos bifaciales. Como ya sabemos esta tecnología se está haciendo un hueco cada vez mayor en el mercado e incluso está impulsando y liderando las investigaciones y los desarrollos de los módulos FV en general. ¿Por qué será? Pues desde que la tecnología PERC ha llegado de forma masiva, la tecnología bifacial se está abriendo gran camino, ya que entre una y la otra, hay tan solo un pequeño paso para conseguir grandes repercusiones.

La tecnología bifacial ha llegado para captar gran parte del mercado, principalmente él de grandes plantas, debido a su más que interesante incremente de la producción, a la vez que un reducido aumento del precio €/Wp. Es decir, pagando tan solo un poco más, se puede generar mucho más.

Pues la célula tipo n tiene un mejor coeficiente de bifacialidad que la célula tipo p. Es decir que de por sí, esta célula puede generar más potencia por la parte trasera que la tipo p. El factor o coeficiente de bifacialidad (%) se define como la relación entre la eficiencia que se obtiene por la parte trasera del módulo y la eficiencia que se obtiene por la parte delantera del módulo cuando ambas caras están sometidas a la misma irradiancia, por ejemplo, 1000W por metro cuadrado como en las pruebas estándares.

Esta ventaja no es desdeñable, sobre todo cuando algunos fabricantes evalúan la posibilidad de mantener únicamente líneas de módulos bifaciales en un futuro no tan lejano.

Todas esas ventajas que hemos mencionado suman más potencia. Por eso podemos pensar que el desarrollo de la tecnología N-Type va a acaparar cada vez más importancia en el mercado y esta tecnología va a abrirse camino poco a poco.